-¡Con que facilidad me frustro!- musitó.Estudié sus ojos y de repente comprendí que aquello era casi tan nuevo para él como para mí.A él también le resultaba difícil a pesar de los muchos años de inconmensurable experiencia.Ese pensamiento me infundió coraje.-Tengo miedo , además de los motivos evidentes , porque no puedo estar contigo y porque me gustaría estarlo más de lo que debería.Mantuve los ojos fijos en sus manos mientras decia aquello porque me resultaba difícil confesarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario